Mujer con dos vaginas
pero nuestra
imaginación no cesa de funcionar y por eso quedan algunos interrogantes que no
serán difíciles de resolver.
Suponemos (nuestro bocho
siempre al máximo) que nos encontramos con una señorita que nos revela poseer
dos vaginas ¡ Mamita querida! ¡Que alegría incontrolable!
Pero es necesario actuar
con serenidad e implementar una estrategia de género para salvaguardar no solo
nuestra integridad física sino también nuestra hombría de bien.
Seguidamente aportamos algunas ideas que pueden resultar
interesantes si se nos presentara una situación parecida.
1- Ante la revelación, no es cuestión de decir “no creo”, “me estás jodiendo”, me viste cara
de boludo”, etc. Lo que corresponde es
mostrar indiferencia
2- No beber en abundancia en la previa, para no pensar que estamos viendo doble.
3- En el momento de la sorpresa, mantener la calma, y
utilizar solamente la que se emboque primero, porque a veces cuesta provocar el
climax, y cuando lo logramos no es cuestión de decir “mato dos pájaros de un
tiro” , “dos por un peso” o similares, porque ahí perdimos
la batalla.
4- Evaluar previamente cual se encuentra en
condiciones óptimas de receptividad.
5- No utilizar el azar (una, dos, lituá) para elegir.
6- Ante la duda, planificar los días, por ejemplo:
lunes derecha, martes y miércoles descanso, jueves izquierda, viernes descanso.
Excepciones sábado de fiesta o feriados: a elección. Tampoco es cuestión de
gastar a cuenta.
7- No compartir ni realizar préstamos ante la
abundancia
8- Mantener un secreto infranqueable para evitar
pedidos desmesurados o ataques por la espalda de los “amigos y enemigos”
9- Conservación de la salud mediante controles
periódicos (nuestra salud)
10- Si los órganos que posee la señorita son independientes en su
excitación, no pedir ayuda. O sí. A Dios
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